Mi trayectoria en Transferencia de Tecnología.
Hace doce años, cuando comencé mi carrera en innovación, nunca imaginé que terminaría traduciendo “membranas de nanofiltración” en “filtros eficientes y avanzados” para profesionales de compras. Pero así es el mundo de la transferencia de tecnología.
Soy Melissa Londoño Ávila, jefe de Transferencia Tecnológica en la Dirección de Innovación y Desarrollo Tecnológico de EAFIT. Mi trabajo es ser ese puente fundamental que conecta la investigación académica con el mercado, permitiendo que nuestras creaciones realmente impacten en la sociedad.
El desafío de transformar la innovación en negocios viables.
En EAFIT, nos enfrentamos a un desafío constante: nuestros investigadores son genios creando ciencia y productos innovadores, pero muchas veces no saben cómo llevar esas innovaciones al mercado para lograr un impacto real. Aquí es donde intervenimos nosotros, en Transferencia, para guiar y acompañar este proceso.
Uno de los aspectos más complicados de mi rol es gestionar las realidades y desafíos que surgen al intentar transformar una idea innovadora en un negocio viable. Recuerdo un proyecto en particular donde, después de meses de resultados prometedores en el laboratorio, descubrimos que la tecnología no era escalable para producción masiva. Fue un momento difícil, pero nos enseñó la importancia de considerar la viabilidad comercial desde las etapas iniciales de la investigación.
Nuestro trabajo va mucho más allá de simplemente conectar investigadores con potenciales socios industriales. Requiere una comprensión profunda de múltiples áreas de conocimiento y la capacidad de traducir términos técnicos complejos en conceptos que el mercado pueda entender. Es como ser un intérprete entre dos mundos que hablan idiomas diferentes. La tolerancia a la frustración y la persistencia son cualidades indispensables en nuestro equipo. Transformar resultados de investigación en negocios no es un camino lineal y está lleno de intentos y errores. Cada “no” que recibimos no es un obstáculo, sino una oportunidad para aprender y mejorar.
La visión futura: un ecosistema de innovación sostenible.
Una parte fundamental de nuestro rol es inspirar y motivar a los investigadores a adoptar una mentalidad emprendedora. Les ayudamos a entender que no necesitan saberlo todo, sino que deben enfocarse en sus fortalezas y construir equipos que complementen sus habilidades. Es crucial que confíen en nosotros para guiarlos a través de los aspectos legales, financieros y de mercadeo necesarios para llevar sus innovaciones al siguiente nivel.
Nuestro objetivo final es la transformación social y económica. Ya sea aumentando la productividad en el sector agrícola, mejorando la calidad de vida de una persona con una deformación craneal, u optimizando procesos industriales mediante modelos matemáticos avanzados, el impacto de nuestro trabajo es tangible y significativo. No tenemos una fórmula secreta para conectar de manera efectiva el conocimiento con las expectativas de la industria, es un proceso que hemos ido adaptando y está en constante evolución. Este esfuerzo continuo refleja nuestro compromiso con la excelencia y nuestra capacidad de respuesta ante un entorno dinámico y cambiante.
De cara al futuro, mi visión es posicionar a EAFIT como un referente internacional en transferencia de tecnología. Estamos trabajando en la creación de un ecosistema de innovación más robusto, donde la colaboración entre academia, industria y gobierno sea la norma, no la excepción. Creo firmemente que la transferencia de tecnología es la clave para impulsar el desarrollo económico y social de Colombia, y estoy comprometida a seguir liderando este camino de transformación.